Don espiritual del Aliento o Estímulo

1 Corintios 12:27-28
Este don, también llamado de exhortación, implica motivar, alentar, consolar a otros de tal modo que maduren en su caminar con Jesús.

Personas con este don
Suelen ser creyentes con sensibilidad inusual para, y que son atraídos por, aquellas personas desalentadas o en lucha. Como resultado, los demás suelen ir tras ellos en busca de palabras de sanidad, gracia y verdad, de consejo compasivo.
Suelen tener también altos niveles de paciencia y optimismo y facilidad para entablar relaciones uno a uno, por lo cual prefieren trabajar en pequeños grupos o de manera individual.

Exhortación en la Escritura
Jesús nos dijo que amáramos a nuestros enemigos y les hiciéramos bien (Lucas 6:27-35), y exhortó a “abandonar nuestra vida de pecado” (Juan 8:11). Bernabé, cuyo nombre significa “hijo de exhortación” (Hechos 4:36), alentó a Pablo (Hechos 9:27) y a Juan Marcos (Hechos 15:39). Pablo tuvo este don (Hechos 14:21-22; 16:40; 20:1) así como Judas y Silas (Hechos 15:31-32).

¿Tienes este don?
¿Te buscan para consejo y exhortación?
¿Disfrutas caminar con alguno en medio de dificultades?
¿Te atraen aquellos heridos y en necesidad?
¿Eres paciente con los demás?
¿Prefieres hablar personalmente con alguno sobre sus problemas, en lugar de enviarlo a alguien más en busca de ayuda?
¿Te es fácil expresar alegría en presencia de aquellos que sufren?

P. Mark Driscoll, http://theresurgence.com/series/spiritual_gifts