En Los Afectos Religiosos, Jonathan Edwards ofrece la siguiente explicación del por qué existe el canto y la poesía.
Y el deber de cantar alabanzas a Dios parece haber sido instituido para estimular y expresar afectos religiosos. No se le puede atribuir otra razón al por qué debemos expresarnos a Dios en verso, en vez de en prosa, y con música, excepto, que tal es nuestra naturaleza y constitución. Tales cosas tienen la tendencia de mover nuestros afectos.
Para que esto tenga el peso que tuvo para Edwards debemos recordar que:
- "La Verdadera religión consiste grandemente en los afectos"
- No hay verdadera fe sin que los afectos hayan sido despertados
- Dios es más glorificado cuando él nos afecta y no simplemente cuando es conocido por nosotros.
- John Piper
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Invitamos a publicar comentarios. Apreciamos que en todo lo haga con cortesía y respeto buscando la edificación.