Exhortación

He aquí una sencilla exhortación que trato de implementar en nuestra familia:
Busca ver y sentir el evangelio como más grande a través de los años, y no como más pequeño.

Somos tentados a pensar que el evangelio es para principiantes, y que de ahí nos movemos a cosas más grandes. Pero el verdadero reto consiste en ver el evangelio como lo más grande –y cada vez más grande, todo el tiempo.

El evangelio es mayor cuando, en tu corazón,
La gracia es mayor;
Cristo es mayor;
Su muerte es aún más maravillosa;
Su resurrección es más sorprendente;
La obra del Espíritu es más poderosa;
El poder del evangelio tiene mayor penetración;
Su extension mundial abarca más;
Tu propio pecado es más feo
El Diablo es más malvado;
Las raíces del evangelio en la eternidad son más profundas;
Su conexión con todo en la Biblia y en el mundo es más fuerte;
Y la magnitud de su celebración en la eternidad es más ruidosa.

Así que ten presente esto: Nunca permitas que el evangelio se haga más pequeño en tu corazón.

Ora que no suceda esto. Lee libros sólidos sobre esto. Canta sobre ello. Dile a alguien sobre ello, alguien que sea ignorante o inseguro sobre esto.

Y ahora les recuerdo, hermanos, del evangelio… la buena noticia que les di. Ustedes la recibieron con gusto y confiaron en ella. Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras (1 Corintios 15:1-4)
John Piper, DG blog.